El gobierno limitó el gasto público, frenando el avance de importantes proyectos de inversión además de suspender próximas operaciones de endeudamiento, a fin, según lo señalado por la Ministra de Economía, de poder cumplir con las metas fiscales de 2010, lo que permitiría un ahorro aproximado de S/. 2300 millones.
El decreto, publicado en el diario oficial, precisó que el crecimiento del gasto en bienes y servicios no podrá ser este año mayor al 3% del valor nominal ejecutado en el 2009, cuando fue golpeado por la crisis financiera global.
Asimismo, señaló que los proyectos de inversión pública que no hayan comenzado a concretarse, pero presupuestados para este año, solo podrán ser ejecutados hasta un 25%, Suspendiendo, a partir de la fecha nuevas operaciones de endeudamiento y pospuso hasta el 31 de diciembre de este año el trámite de demandas adicionales de recursos del Estado vía créditos suplementarios.
La serie de medidas tienen como objetivo cumplir la meta de un déficit fiscal equivalente al 1.6% del Producto Interno bruto (PIB) para el 2010, ya establecido por el Gobierno.
Según el Banco Central de Reserva del Perú, así como otras entidades dedicadas al análisis de la economía nacional, el gasto público en el último cuatrimestre ha sido demasiado agresivo, lo que ha ocasionado el crecimiento del mismo significativamente en comparación con el 1er cuatrimestre del 2009, factores que aparentemente han recalentado la economía y que por dicho efecto podrían generar un proceso inflacionario. En consecuencia, a fin de poder reducir de forma gradual este calentamiento el Estado recurre a la aplicación de reglas macrofiscales como las señaladas en el Decreto de Urgencia N° 037-2010 publicado en el diario El Peruano el día de hoy.
Con ello, los recursos asignados por el Estado al Fondo de Contingencia y cuyo gasto estaba adecuadamente segmentado para diversos fines no será utilizado, por ende no inyectado a la economía.
Pero ¿Cuál es el pro y contra de esta decisión establecida por el Ejecutivo?
Pero ¿Cuál es el pro y contra de esta decisión establecida por el Ejecutivo?
La parte positiva de la citada medida es que se actúa de forma preventiva contra el recalentamiento de la economía previniendo un posible proceso inflacionario. Sin embargo, el efecto negativo y peligroso de esto es que, en un posible escenario, podría verse perjudicado el crecimiento de la economía, ya que las medidas crearían en los inversionistas desconfianza cuyo efecto sería la desaceleración de la inversión en varios sectores productivos, ocasionando un efecto espejo frente a la medida tomada por el Ejecutivo.
Hay que tener en cuenta que diversos analistas han proyectado que el Perú experimentaría un gran avance económico durante el año 2010 luego de registrarse una expansión del 0.9% durante 2009 por la crisis global. Esta expansión peligraría con el intempestivo freno impuesto por el Ministerio de Economía y Finanzas y respaldado por el Presidente. Con estas medidas aplicadas de forma acelerada, el Ejecutivo no hace más que confirmar que los ingresos tributarios no serán suficientes para cubrir el presupuesto del presente año.
El Estado se convertiría en el principal obstáculo del avance de los sectores productivos en el país con la aplicación de estas medidas. Se está poniendo en riesgo la ejecución de importantes proyectos de inversión pública indispensable para el desarrollo de las regiones del interior del país, quienes una vez más son el eslabón más golpeado por las decisiones apresuradas y poco responsables de quienes deberían liderar con criterio el destino de la nación.
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